Cómo mejorar una bicicleta de carretera

Modificar una bicicleta de carretera supondría aplicar cambios a sus principales componentes, lo que puede llegar a maximizar su rendimiento y, por tanto, mejorar los resultados como ciclista.

Todas las bicicletas, por muy buenos componentes que tengan, son susceptibles de maximizar su rendimiento. Esto se debe a que cada ciclista es único, así que los requerimientos de cada uno son muy diferentes y, por tanto, toda bici se puede optimizar hasta llegar a cubrir el 100% de las necesidades del corredor.

¡Prácticamente todos! Una de las ventajas de las bicicletas de carretera es que cualquiera de sus componentes se puede modificar para mejorarla. Sin embargo, recuerda elegir la bicicleta de carretera que más se adapte a ti para tener que hacer el menor número de cambios posible –y, por tanto, reducir al máximo los costes–.

A continuación te contamos cómo puedes mejorar tu bicicleta modificando los diferentes componentes. 

El cambio de ruedas y neumáticos puede tener un impacto significativo en el rendimiento y la comodidad de tu bicicleta. Que las ruedas sean más ligeras hará que tengan menos resistencia a la rodadura y, por tanto, mejore la eficiencia del pedaleo. Esto supone conseguir una mayor velocidad con un menor esfuerzo.

Además, unos neumáticos más anchos pueden proporcionar una mayor absorción de impactos, lo que significa una conducción más suave y cómoda.

Un sillín adecuado puede marcar la diferencia en términos de comodidad, sobre todo si usas tu bici para largos trayectos. Por eso, te recomendamos elegir un sillín ergonómico y acolchado. Por otra parte, la comodidad influye directamente en la eficiencia de pedaleo, puesto que un buen sillín mejora la posición del ciclista y, por tanto, la energía de pedaleo.

Estos son algunos de los elementos que hacen que el sillín sea el adecuado.

Los frenos pueden mejorar de forma muy eficaz tu bici de carretera. Puedes elegir unos frenos de alta gama, que ofrecen una mayor potencia de frenado y una respuesta más rápida. Unos mejores frenos harán que tus paradas sean más seguras y controladas.

De hecho, un cambio de frenos es normalmente uno de los más solicitados. Los sistemas de frenado se desgastan con el tiempo, lo cual puede perjudicar a tu seguridad sobre ruedas, así que una mejora en los frenos puede ser la solución.

Un manillar más ergonómico, que se adapte mejor a tu posición sobre la bici, puede hacer que tus paseos o carreras sobre ruedas sean mucho más cómodos. Además, puedes optar por un manillar más aerodinámico, de forma que se reduzca la resistencia al viento y tus carreras sean mucho más eficientes.

La ergonomía del manillar puede ayudar a aliviar la presión en ciertas áreas y reducir la fatiga muscular que puede producirse por llevar una postura muy forzada.

Son muchos los elementos de la transmisión que se pueden modificar para mejorar la bici. Por ejemplo, cambiar el plato y las bielas puede ayudarte a optimizar la relación de marchas y mejorar la eficiencia de pedaleo. En cuanto al cassette, a mayor número de piñones, mayor será la variedad de marchas para adaptarte a diferentes terrenos.